Decididamente, las piezas tienen vida propia. Las hay muy tímidas que cuando tocan el suelo corren a esconderse en cualquier rincón, cuanto más oscuro, mejor. Otras, son sociables, muestran un especial apego por tu persona y se esconden en un rincón de tu ropa. Otras son independientes y desaparecen enseguida; algunas las pillas antes que se marchen, justo en la esquina opuesta. Son muy traviesas y juegan al escondite, y mirando donde has mirado un montón de veces, allí están, en medio de niguna parte, inocentemente, como si fuera lo más natural del mundo, mirándote desafiantes y diciéndote con descaro:
-- Qué pasa? Me sentía agobiada con tanta hermana alrededor y me fui a da una vuelta!
Bueno, ya hemos filosofado un poco. Que descanso!
PS: Qué decía? Ha llegado mi mujer de la calle y ha ido directa como una flecha a un sitio en medio del salón que yo había mirado un montón de veces...
-- Oye, ya sabes que tienes aquí una pieza?
Son traviesas, sí...
Jajajajaja ^-^
Ay las piezas...!
Esas incomprendidas....
Gusto encontrarte por aquí, justo pasaba una de tus piezas, saludos crack.
Hey, Fernando (y alguns otros),
Ya sabía que estabas por aquí y te persigo.
Saludetes, c_ol
Mientras aparezcan su periplo por el subuniverso me es indiferente; pero cuando no aparecen... p_p a_r b_k2
La que falta suele estar justo delante de mis narices, o incluso en mi mano :D :D